Al-Akhbar: “Haniyeh junto con el Sayyed Nasralá discutieron el plan para la liberación de la ocupación israelí”
Según el diario Al-Akhbar, con sede en Beirut, el reciente golpe a Israel durante la guerra de 11 días en Gaza fue parte del plan de liberación.
La resistencia palestina adoptó tácticas utilizadas por Hezbolá durante la guerra de 2006 al establecer sitios de lanzamiento de cohetes simulados para engañar a la fuerza aérea israelí, según el informe.
Ansarulá de Yemen también se comunicó con Hamas y solicitó coordenadas para los sitios que quería atacar con misiles y drones, pero Hamas le dijo al movimiento popular que no interviniera mientras el ejército israelí no hubiera cruzado las "líneas rojas".
Tel Aviv comenzó a bombardear Gaza el 10 de mayo, después de las represalias palestinas contra las redadas violentas contra los fieles en la Mezquita de Al-Aqsa y los planes de Israel de forzar a varias familias palestinas a abandonar sus hogares en el barrio de Sheij Al-Yarrah de Al-Quds en Jerusalén oriental.
Aparentemente sorprendido por los bombardeos de cohetes sin precedentes desde Gaza, Israel anunció un alto el fuego unilateral el 21 de mayo, que los grupos de resistencia palestina aceptaron con la mediación egipcia.
Según el Ministerio de Salud de Gaza, 254 palestinos murieron en la ofensiva israelí, incluidos 66 niños y 39 mujeres, y 1948 más resultaron heridos.
En un discurso televisado la semana pasada, el jefe de Hezbolá del Líbano, Sayyed Hassan Nasralá, advirtió que cualquier agresión contra Jerusalén Al-Quds o los lugares sagrados de la ciudad significaría una guerra regional.
"Cuando los lugares sagrados enfrentan serias amenazas, no hay líneas rojas", dijo. "Todos los movimientos de resistencia no pueden sentarse y observar si los lugares sagrados están en peligro".
De manera similar, el líder de Hamas en Gaza, Yahya Sinwar, advirtió sobre una guerra regional en caso de que los lugares sagrados fueran atacados y que todos los grupos de resistencia se unirían en cualquier batalla futura.
“[El Sayyed] Nasralá debe tomarse en serio; él es el enemigo más creíble de Israel, por lo general no hace amenazas vacías”, dijo una fuente de seguridad israelí de alto rango al sitio web de noticias al-Monitor bajo condición de anonimato. "El hecho de que se uniera a Sinwar en este momento y anunciara que cualquier movimiento unilateral de Israel en Jerusalén conduciría a la guerra debería ser tratado [...] como una advertencia muy seria".
El ex legislador israelí Zvi Hauser dijo: “Esta es probablemente la última vez que Israel se enfrentará solo a Hamas. En el futuro, Israel enfrentará el desafío al mismo tiempo en frentes adicionales, como el frente norte, lo que hará que el desafío sea mucho más difícil".
En un programa de televisión, el editor en jefe de Al-Akhbar, Ibrahim al-Amin, dijo que se estableció una sala de operaciones conjunta para la reciente guerra de Gaza en Beirut, donde oficiales de Hamas, Hezbolá y el Cuerpo de Guardias de la Revolución Islámica de Irán (CGRI) supervisaban el conflicto.
La sala de operaciones no solo era un lugar para intercambiar experiencias y tácticas, sino también un lugar donde operaban aparatos de inteligencia, agregó.
El general Ismail Qa'ani, jefe de la Fuerza Quds del CGRI, visitó Beirut dos veces durante la guerra, dijo Amin, y señaló que la resistencia libanesa también logró trasladar a oficiales de alto rango de Hamas a Beirut a través de "rutas especiales".
"Israel sabe que el primer resultado de la victoria de Gaza no es que Gaza se vincule con Al-Quds, Ribera occidental y los árabes de 1948, es decir, la conexión de la resistencia con otras partes de Palestina, sino que el resto de Palestina se una al eje de la resistencia", dijo.
“[El Sayyed] Nasralá dijo que la resistencia en el mundo árabe debería apoyar a Gaza. Significa que este frente está obligado a apoyar a Palestina incluso si no hay necesidad de entrar en la guerra”, agregó el editor en jefe de Al-Akhbar, Ibrahim al-Amin.
ABNA24 redacción española
